23 de marzo de 2012

Las Brisas: historia de un ícono hotelero 1957-2012


La Orgía de los Sabores

Las Brisas: historia de un ícono hotelero 1957-2012

Por Héctor León
fotos: agencia todocultura

 Marilyn Monroe, Frank Sinatra, Simone de Beauvoir, Marshall Mcluhan, Susan Sontag, Brigitte Bardot, Liz Taylor, John Lennon y Yoko Ono, Dustin Hofman, Henry Kissinger y Jacqueline Kennedy, entre un universo de personalidades fueron huéspedes de Las Brisas, ícono en la historia de la hotelería mundial que a sus 54 años de vida se renueva y continúa impulsando al Acapulco Dorado del glamour, un templo rosa (por su color bandera) que fuera elegido como el mejor complejo hotelero del mundo.

Hospedarse en una de las 263 casitas con alberca privada y dos terrazas con vista a la Bahía más famosa y hermosa del mundo es un placer que sólo puede darse en Las Brisas. Sentarse en sus restaurantes a degustar la cocina exquisita finamente diseñada, entre 16 hectáreas de jardines de habiscos y tulipanes --recuerdo de lo que fue el follaje salvaje del imaginario acapulqueño, de todos los que vimos por vez primera el mar--, corresponde a inscribirse en la leyenda viviente del hotel que le dio fama internacional al puerto. 

“No es exagerado decir que la gente viajaba a Acapulco porque ahí se encontraba Las Brisas”, escribió Jimm Budd, periodista experto en viajes. Los 50, 60 y 70, cuando la ebullición social juvenil y la explosión artística hacían epicentro en los happenings del jet set mundial teniendo como escenografía los atardeceres cristales y un clavadista cruzando el sol desde La Quebrada.





La orgía del placer
Las Brisas Acapulco
Enclavado en las colinas de la carretera escénica, entre el Acapulco de antaño y el inicio del Acapulco Diamante, lo primero que se le viene a la mente al turista es que aquello es mucho más que un hotel; una flotilla de jeeps con rayas rosas, con chóferes (camareros) vestidos de rosa, conducen al visitante a su casita, de la cual sólo saldrá por este servicio en minutos. Son los elevadores del complejo.

Prácticamente no será necesario salir de la casita (que no son cuartos).  Detrás la puerta de madera un exuberante salón inmaculadamente blanco con sillones, mesas de estar, cama ad hoc, espejos, lámparas, enorme servi bar, monumental baño, y hacia el horizonte una terraza con su respectivo comedor y camastro para disfrutar de la bahía. La casita tiene una escalera que conduce a un bajo fondo con una bella alberca volada en el precipicio selvático, despiadada terraza con una techito arabesco, camastros y tulipanes rojos flotando en el agua.

Una pequeña ventana al lado de la puerta, cual caja de servicio con comunicación a la casita, en las mañanas tendrá un breve petite desayune con cafetera, frutas, croassants y chocolatines, para que el visitante pueda disfrutar de la vista en su terraza, de un café extrañamente delicioso y fruta en boca.


Hasta el Desayuno

El restaurante para desayunar, El Tupilán, en lo más alto de la colina, arriba de las canchas de tenis -- después del café matinal, tal vez un poco de sol, un baño muy íntimo en la alberca--, corresponde a la experiencia sensorial matinal, de las muchas que deparan al sublime ocio del turista por las cocinas de sus seis restaurantes.


Desayunar en las alturas, con unos estupendos huevos al albañil, jugos anti gripales y antioxidantes exuberantes hechos al momento, matronas guerrerenses sazonando salsas y mil quesadillas, probar la barbacoa de pollo estilo Tixtla y un manjar de guisos en buffet, desde su terraza monumental y recordando la era de oro de Acapulco, las primeras discos de Latinoamérica como el Tequila a Go Go (1964), Le Jardín (1969), el Boccacio (1971), las Mil y una noches, o el legendario Baby O.

 

Para la noche, en  La Perla del Pacífico, el Restaurante Bellavista (cuatro diamantes) con su diseño de media luna, habrá que experimentar su cocina vanguardista bajo las estrellas degustando su Langosta Bellavista;  o la cocina vanguardista y escoger entre cien etiquetas de los mejores vinos del mundo, y en otra ocasión, podré hablar de los restaurantes La Concha, Deli.Shop, Sunset Bar y Bellavista Bar.
El Dato

LAS BRISAS ACAPULCO

(52 744) 469 69 00 Ext. 6306

Directo: 469 69 27

Carr. Escénica #5255 Acapulco, Gro. 39867


Las

Brisas Acapulco

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